Bienestar

La importancia del sueño para tu salud metabólica

¿Sabías que dormir mal puede afectar tu peso y tu riesgo de diabetes? Te lo explicamos todo.

Dr. Raúl Izquierdo Dr. Raúl Izquierdo • 10 de Agosto, 2024 • 9 min de lectura
Sueño y salud metabólica

En nuestra búsqueda de una mejor salud, a menudo nos centramos en la dieta y el ejercicio, dejando de lado un pilar fundamental: el sueño. La evidencia científica es clara: la calidad y cantidad de nuestro sueño tienen un impacto directo y profundo en nuestra salud metabólica.

¿Cómo afecta la falta de sueño a nuestro metabolismo?

Dormir poco o mal no solo nos hace sentir cansados y de mal humor. A nivel fisiológico, desencadena una cascada de efectos negativos:

1. Aumenta la resistencia a la insulina

Incluso una sola noche de sueño insuficiente puede reducir la sensibilidad a la insulina en las células grasas hasta en un 30%. [1] Cuando esto se vuelve crónico, el cuerpo necesita producir más y más insulina para gestionar la glucosa en sangre, allanando el camino para la prediabetes y la diabetes tipo 2.

2. Desregula las hormonas del apetito

La falta de sueño aumenta los niveles de grelina (la hormona del hambre) y disminuye los de leptina (la hormona de la saciedad). [2] Esta combinación nos hace sentir más hambrientos, especialmente de alimentos ricos en calorías y carbohidratos, y menos satisfechos después de comer.

3. Eleva el cortisol

El sueño es crucial para regular el cortisol, la hormona del estrés. La privación de sueño mantiene los niveles de cortisol elevados, lo que puede promover el almacenamiento de grasa, especialmente en la zona abdominal, y aumentar aún más la resistencia a la insulina.

Consejos para mejorar tu higiene del sueño

Mejorar tu sueño no requiere soluciones mágicas, sino la construcción de hábitos consistentes. Aquí tienes algunas estrategias efectivas:

  • Establece un horario regular: Acuéstate y levántate a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana.
  • Crea un ambiente propicio: Tu habitación debe ser oscura, silenciosa y fresca.
  • Evita las pantallas antes de dormir: La luz azul de teléfonos, tabletas y televisores interfiere con la producción de melatonina, la hormona del sueño.
  • Limita la cafeína y el alcohol: Especialmente por la tarde y noche.
  • Haz ejercicio regularmente: Pero evita el ejercicio intenso justo antes de acostarte.
  • Crea una rutina relajante: Lee un libro, toma un baño caliente, medita o escucha música tranquila.

Conclusión

No subestimes el poder del sueño. Es una de las herramientas más efectivas y gratuitas que tenemos para proteger y mejorar nuestra salud metabólica. Priorizar el descanso es tan importante como lo que comes o cuánto te mueves.

Referencias

  1. Broussard, J. L., Ehrmann, D. A., Van Cauter, E., Tasali, E., & Brady, M. J. (2012). Impaired insulin signaling in human adipocytes after experimental sleep restriction: a randomized, crossover study. Annals of Internal Medicine, 157(8), 549-557.
  2. Taheri, S., Lin, L., Austin, D., Young, T., & Mignot, E. (2004). Short sleep duration is associated with reduced leptin, elevated ghrelin, and increased body mass index. PLoS Medicine, 1(3), e62.